Hábitos & Consistencia
Vivimos en una era donde es normal sentirse con problemas digestivos, malos niveles de energía, poca agilidad mental, cambios de estado de ánimo y constantemente estresados. Si intentas buscar una solución encontrarás que todo mundo te quiere vender promesas a corto plazo, sea esto un suplemento nuevo o unas técnicas de respiración para aguantar estar en agua helada.
No creo que ninguna de esas prácticas sean malas, solo creo que son ineficaces a largo plazo. La mayoría de esas herramientas fueron diseñadas para tratar un síntoma, como bien sabemos el tratar un síntoma no necesariamente erradica el problema de raíz.
Al mismo tiempo es importante que evaluemos y seamos objetivos al identificar de dónde y cómo surgió el problema, sea cual sea.
Pero te puedo casi garantizar algo, todos los problemas que mencioné al inicio se pueden mejorar y en algunos casos eliminar con algo muy simple.
Créeme, le he dedicado los últimos 5 años a estudiar todo tipo de nutrición y medicina funcional para poder responder esta pregunta.
Y no, no se trata de un suplemento mágico o de un ayuno insostenible. Pero, ¿realmente quieres saber la solución?
La mayoría de las personas no lo van a creer, es más, probablemente van a dudar de lo que voy a decir pero si reflexionas en tu último año puede que encuentres algo de verdad en lo que te voy a decir.
Esa solución de la que hablo es la consistencia.
Suena loco, ¿no?
Si hablamos de temas hormonales, peso, problemas digestivos y/o niveles de energía, todos estos se van a ver afectados por nuestra rutina o falta de consistencia en ella.
Hoy en día es muy fácil catalogar todos nuestros problemas como temas hormonales, digestivos, etc etc y por lo mismo se vuelve muy fácil que la gente te venda 3,5 o hasta 10 suplementos que debes tomar mensualmente. No digo que no haya algún momento o persona que si lo requiera, pero siendo honestos, van a ser un porcentaje muy bajo de la población.
Desde un aspecto hormonal es difícil que nuestro cuerpo se sienta bien si estamos constantemente variando nuestras horas de sueño y no teniendo suficiente tiempo para canalizar el estrés. El estrés no es malo, el mal manejo de él es lo que nos mata lentamente.
Muy probablemente no somos intolerantes al gluten, es difícil identificar alguna sensibilidad a alimentos si no tenemos horarios constantes de comer o si simplemente estamos comiendo apresurados todo el tiempo.
Niveles de energía, si algo de lo mencionado en rutina de sueño y hábitos de alimentación no está en su lugar, te aseguro que estas dejando mucho espacio a mejorar para tus niveles de energía.
Si has leído hasta aquí, muy probablemente te diste cuenta que algo en tu día a día no te ha permitido tener la mejor calidad de vida posible. Quiero ayudarte, te voy a compartir mis prácticas básicas de estilo de vida.
Dormir - lo más que se pueda sin que te corran o termine tu pareja. La recomendación científica es de 7-9 hrs y entre más horas duermas antes de medianoche (12am) mejor.
Alimentación - crea una rutina de horarios de comida y disfruta de tus alimentos. Esto significa dejar los electrónicos, convivir con gente si puedes y sobre todo tomarte el tiempo para saborear tus alimentos.
Hidratación - toma 35ml de agua por cada kg de peso corporal al día y distribúyelo durante todo tu día. Una manera sencilla de empezar a tomar más agua es al tomar un vaso antes de dormir y al despertar.
Ejercicio - Encuentra una rutina que balancee entrenamiento y descanso, no todos los días pueden o deben ser intensos. El descanso es importante para poder empujar la intensidad los días que se busque eso.
Diversión - Por alguna razón, conforme envejecemos nos dejamos de divertir. Y no me refiero a tu salida del fin de semana, sino a una diversión constante donde perdemos noción del tiempo y somos felices. Diversión diaria. Encuentra una actividad que puedas hacer cada día para divertirte, pueden ser 5 min o el tiempo que tu veas necesario. Algo tan sencillo como cantar en la ducha o bailar al ritmo de tu canción favorita es más que suficiente.
Estrés - Un tema importante para el ser humano, la mayoría de los estreses de hoy en día son más mentales que reales. Claro, su efecto es muy real, por lo mismo es importante que pongamos en práctica actividades que nos ayuden a canalizar el estrés como meditación, escribir o incluso ir a terapia. (recomiendo una combinación de los 3.)
Intenta una de estás prácticas y cuando seas consistente con ella agrega la otra, después de meses siendo consistente notarás que tu calidad de vida mejorará.